Se acerca la temporada de navidad y año nuevo, y como es costumbre en nuestra comunidad latina, la reuniones y encuentros con familiares y amigos no faltan, y por supuesto, las muestras de afecto, cariño, abrazos y besos son parte de las costumbres latinas. Pregunto: ¿Deben los padres forzar o insistir a los hijos e hijas a mostrar afecto abrazando o besando a un familiar o amistad si ellos no quieren?

Esta forma de presión para saludar que algunos padres podrían estar ejerciendo con sus hijos e hijas, podría contradecir los valores inculcados a nuestros hijos/as con respecto al establecimiento de límites físicos que ellos deben poner con los demás, o llevarlos a tener una idea equivocada sobre el consentimiento y el afecto físico.

Es conocido que algunos adultos se aprovechan de los niños, y especialmente niñas en edad de la pubertad y adolescencia para abrazarlas, como una forma de saludar o mostrar cariño, sin el consentimiento de ellos/as o con la incomodidad de cómo son saludadas. No importa si ellos o ellas no han visto a ese familiar por mucho tiempo, o por la simple razón que les trajeron un regalo.

Los niños y niñas tienen derecho a su cuerpo y son ellas/ellas las que tienen que dar el consentimiento de saludar o no a una persona adulta, sea conocido o no. Si su hijo/hija no se siente cómodo/a de dar abrazos y besos a sus familiares, simplemente NO obliguemos o forcemos de saludar de una forma que para los adultos es “normal” o es una forma de mostrar “educación”. Hay muchas otras formas de saludar, mostrar agradecimiento, gratitud y aprecio que no necesariamente requiera contacto físico cuerpo a cuerpo, y en las que ellos/ellas mismos/as se sientan cómodos/as.

Hable con sus hijos/hijas que hay otras formas seguras de saludar y en la que ellos puedan sentirse seguros y cómodos, como: palmaditas en la espalda, un brazo alrededor del hombro, un choque de manos, una señal de “abrazo o beso al aire”, etc. Démosles opciones y que ellos/ellas decidan las formas de saludar a los demás.

Cualquier momento es oportuno para hablar con nuestros hijos/hijas sobre los límites físicos y derechos sobre sus cuerpos, y que se manifiesten cuando se sientan incomodos o incomodas con alguien que las saluda de una manera inapropiada para ellos/ellas, y los adultos tienen que entender y respetar, aunque no estén de acuerdo, y díganle a sus familiares y amigos que estás enseñando a sus hijos/hijas que sean “jefes” de sus cuerpos como parte de enseñarles seguridad sobre sus cuerpos y que no se ofendan por el comportamiento de sus hijos/hijas.

Enséñeles a sus hijos/hijas que ellos «son el jefe de su cuerpo», que ellos/ellas sepan que tienen el control de quién los/las saluda y cómo. Respete la forma que no desea ser saludado/a y que está bien decir NO a la forma de muestra de cariños de la familia y otras personas que ellos/ellas conocen.

Muchas gracias y abrazos a la distancia!!!