En los últimos años se ha generalizado la utilización de la redes sociales con la finalidad de seguir y ser seguido en las rutinas actividades personales, y muchos sin siquiera sospecharlos se han convertido en adictos y hasta morbosos a las redes sociales.

Los usuarios de las redes sociales suelen publicar sus cosas personales en estos espacios abiertos, y al mismo tiempo queriendo saber sobre cada aspecto de la vida de los demás, entrando de esta manera inconscientemente al juego de la comparación con los demás, pudiendo sentir celos por lo que los demás hacen, y algunas veces siéndose frustrados, pues no es la realidad en la que les gustarían vivir.

Muchos de estas personas se preocupan por estar al tanto de los que los demás publican cada momento de sus vidas, mientras que sus relaciones personales con las personas más cercas se desboronan.

Sin darse cuenta, el número de contactos crecen cada día, y entonces son cada vez más personas en seguir, dedicando de manera alarmante muchas horas del día tratando de enterarte de la vida de los demás, hasta que esto se convierte no solo en un estilo de vida sino en una adicción y hasta en un morbo.  Hay personas que si no están constantemente entrando a las redes sociales durante el día, es como que les faltara algo, y se sienten intranquilos, ansiosos y hasta enojados.

Ya no solo se trata del Facebook, sino del Instagram, Snapchat, Twiter, WhatsApp, y muchas otras aplicaciones de las redes sociales que se están haciendo cada vez más populares.

El trasfondo psicológico de esta adicción o morbo por las redes sociales tiene que ver mucho con la necesidad de compensar algún tipo de complejo de inferioridad, baja autoestima, o una exagerada muestra de narcisismo.

¿Entonces, cuál es la solución?

Como cualquier adicción necesita es una desintoxicación. Apagar el móvil o tableta por algunas horas del día y deja de estar fisgoneando en las redes sociales.

Si sientes que no puedes estar algunos momentos sin tu celular, tableta o computadora, es probable que estés adicto/a y necesitas desintoxicarte. Deja de seguir a las personas por un tiempo, elimina temporalmente algunas de las aplicaciones de tu celular o tableta, apaga el teléfono cuando estés sentado en el sofá descansando, mirando televisión, cenando, o en una platicando con alguien. Propón en tu casa “espacios sin celular”, “horas sin celular”, “platicas sin celular”, y sustituye esos espacios haciendo cosas productivas con tus amigos, familia, o hijos.

Imagínese cómo podría sentirte una semana a partir de ahora si no entras a ningún espacio de las redes sociales, y no pones nada, ni comentas nada, ni te comparas con nada, ni con nadie. ¿Cómo sería esa semana? ¿Qué cosa productiva harías con ese tiempo? Ahora imagínate que esta práctica de sustituir esta adicción por más tiempo, y gastar ese tiempo en algo más satisfactorio.

Estoy seguro que las redes sociales es una muy herramienta que ha traído muchas oportunidades, pero como todo exceso puede también ser dañino.

Muchas gracias!!!!